Informes fiables de prestigiosos think-tanks europeos, entre los que se encuentra Global Europe Anticipation Bulletin, señalan que la recesión podría prolongarse durante una década en algunos países y auguran un incremento de la inestabilidad política con riesgo de estallidos sociales2.
En nuestro país, la crisis económica ha tenido un profundo impacto sobre el sistema de relaciones laborales, desencadenando un proceso de destrucción de puestos de trabajo tan intenso como extenso, que el profesor BAYLOS GRAU, de forma muy expresiva, calificaba recientemente de "carnicería laboral"3.
En este contexto, resulta interesante reflexionar sucintamente sobre una de las instituciones más características y fundamentales de ese sistema golpeado por el tsunami económico: nos referimos a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, cuya razón de ser pasada, pero también presente, está ligada de manera indisoluble a la necesidad de protección de los trabajadores dependientes, verdadero origen y motivo de la denominada legislación social.
En efecto, el nacimiento y desarrollo del Derecho del Trabajo está ligado a la acción reivindicativa del movimiento obrero. El capitalismo trajo consigo la formación de la clase obrera, integrada por trabajadores asalariados que, privados de medios de producción propios, venden su fuerza de trabajo para subsistir. La expansión del proletariado durante la industrialización proporcionó a los trabajadores conciencia del antagonismo latente en la producción capitalista y de la necesidad de organizarse para defender sus intereses.
La movilización consiguiente contra el capitalismo, a través de organizaciones sindicales y políticas portadoras de un proyecto revolucionario se conoce, históricamente, como movimiento obrero y es determinante para el surgimiento del Derecho del Trabajo. La presión de las organizaciones obreras forzó la intervención legislativa del Estado, conquistando diversas reivindicaciones sociales que, en el devenir del tiempo, cristalizaron en un bloque normativo ciertamente complejo que se proyecta sobre todos los aspectos de las relaciones laborales: contrato de trabajo, seguridad y salud laboral, Seguridad Social…
Héctor Illueca Ballester Inspector de Trabajo y Seguridad Social
1 comentari:
Estoy completamente de acuerdo con su opinión de que la Inspección de Trabajo y Seguridad Social se instauró para proteger a los trabajadores. Pero mi pregunta es la siguiente: ¿Qué podemos hacer, actualmente, cuando nos encontramos con inspectores corruptos? No hablo sólo de inspectores de trabajo, sino también de inspectores médicos, que hacen la vista gorda ante numerosos casos de accidentes y enfermedades laborales para que las empresas se las "endosen" a la Seguridad Social.
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